El Estadio Alfredo Ramos se encuentra clausurado por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires desde el mes de enero. Se requirió realizar algunas obras como volver a levantar la pared que une el campo de juego con la zona de vestuarios, modificar algunos caños de la zona de plateas, realizar modificaciones eléctricas, ubicar una pared en la zona alta de la tribuna popular local, trabajar en un baño para personas con discapacidad, planos de habilitación, planos eléctricos. Es un procedimiento habitual que se realiza en todos los clubes, sobretodo de la Capital Federal. La diferencia es que en cualquier otra institución, una Comisión Directiva puede gestionar el dinero, los arreglos, los empleados que trabajan, puede encontrarse cara a cara con los funcionarios, puede hacerse responsable de todo tipo de decisión. En Comunicaciones esto no ocurre. Por si esto fuera poco, durante 5 días el GCBA no tuvo ni luz ni agua y decretaron asueto administrativo. Eso demoró que se pudiera presentar el certificado de aptitud técnica del estadio.
La Subcomisión de Fútbol ha trabajado durante más de un mes para cumplir con todos los requisitos que se solicitaron. Y estos han sido realizados. Pero levantar una clausura no es tan sencillo, es un papelería muy grande que incluye visitas al Gobierno de la Ciudad y recepción permanente a sus funcionarios. La Subcomisión de Fútbol está conformada íntegramente por socios del club, por hinchas comunes que para el Club Comunicaciones no son más que socios. No hay Comisión Directiva, las decisiones finales y todas las firmas que tengan que ver con el club deben pasar por el Órgano Fiduciario de administración. ¿Se entiende? Cuando Comunicaciones estaba a punto de quebrar, y una de las decisiones políticas fue liquidar al fútbol porque era deficitario, un grupo de hinchas se hizo cargo de la situación y comenzó a gestionarlo. Militaba en la Primera D, y no había ni medias para los jugadores. Hoy la situación es bastante distinta y no hay que restarle mérito a esta gente, es una falta de respeto dudar de la honestidad de personas que dejaron parte de su vida en el club.
La Subcomisión de Fútbol ha trabajado durante más de un mes para cumplir con todos los requisitos que se solicitaron. Y estos han sido realizados. Pero levantar una clausura no es tan sencillo, es un papelería muy grande que incluye visitas al Gobierno de la Ciudad y recepción permanente a sus funcionarios. La Subcomisión de Fútbol está conformada íntegramente por socios del club, por hinchas comunes que para el Club Comunicaciones no son más que socios. No hay Comisión Directiva, las decisiones finales y todas las firmas que tengan que ver con el club deben pasar por el Órgano Fiduciario de administración. ¿Se entiende? Cuando Comunicaciones estaba a punto de quebrar, y una de las decisiones políticas fue liquidar al fútbol porque era deficitario, un grupo de hinchas se hizo cargo de la situación y comenzó a gestionarlo. Militaba en la Primera D, y no había ni medias para los jugadores. Hoy la situación es bastante distinta y no hay que restarle mérito a esta gente, es una falta de respeto dudar de la honestidad de personas que dejaron parte de su vida en el club.
Luego de realizadas las obras, había que tramitar el levantamiento de clausura en el GCBA, el Dr. Eduardo Fenochietto debía hacerse presente en el lugar. Pero nunca fue, a pesar de los reiterados llamados por parte de Fútbol. Cuando se presentó, ya era tarde, y no daban los tiempos para habilitar el estadio.
Ahora, ¿Por qué Español y por qué San Lorenzo? En la primer fecha se gestionó para jugar en diferentes estadios: Argentinos Juniors, All Boys, Atlanta, Ferro. El alto precio que posee el alquiler de canchas de categorías superiores, más el costo del operativo policial que suele incrementarse, más los controles privados que irremediablemente hay que tener, hacían que sea económicamente imposible jugar en esas canchas. Surgió la opción de Español, con la contra de que sería sin público a causa de la mala relación que existe entre ambas hinchadas. No hubo otra opción y debimos disputar el partido con Barracas en ese estadio. Ahora la situación es similar, con la contra de que ya comenzó la B Nacional y esta semana comienza la Primera División, por lo que muchas canchas de Capital estarán ocupadas. ¿Qué opciones puede haber? Las mencionadas anteriormente, Nueva Chicago (por los recientes incidentes no se puede jugar alli), Defensores de Belgrano (también iría sin público), Atlanta (está estrenando un sistema de riego que imposibilita pisarla mucho durante un tiempo), Huracán (el alquiler es muy costoso), Barracas Central (se descartó por motivos obvios).
¿Por qué San Lorenzo un día lunes? Simple, la seguridad de la zona solamente podía prestar servicio ese día. Hubiera sido más fácil jugar en Español o Defensores de Belgrano, sin gente. Pero se priorizó pensar en el hincha, y por eso se hizo un esfuerzo muy grande para alquilar San Lorenzo (club al que agradecemos la predisposición).
Damos por hecho que el Nuevo Gasómetro se vestirá de amarillo y negro, como en aquella inolvidable tarde de 2005.